En
la foto aparecen Roberto Acevedo Burgos y Rafael Campos Pina; dos colosos, profesores y maestros así como precursores
en el impulso primario en el proceso de modernización del sistema de control de tránsito
aéreo de aviación civil R. Dominicana.
A pesar de que existen otras
figuras que trabajaron, sin descanso, en el proceso que comenzó, a mediado de la década de los años setenta, con la presencia
en el país de una asesoría de la Organización de Aviación Civil Internacional
OACI, que vino a mediado de los
setentas, para colaborar con en el proyecto
de modernización del sistemas de navegación aérea de República
Dominicana, imposible negarlo; Roberto Acevedo
Burgos y Rafael Campos Pina, necesariamente están entre aquellas figuras que lo
dieron todo para que nuestro país haya alcanzado y mantenido los niveles que ha logrado el
sistema de aviación civil de República Dominicana en las ultimas décadas, a pesar de que faltan algunas cosas por alcanzar, sobre todo en el tema de de la industria del transporte aéreo, donde no hemos podido consolidar un proyecto que impacte un mercado de 10 millones de pasajeros y miles de toneladas de carga aérea.
Como recordaran, para entonces, solo de brindaban servicios
de información de vuelo en el espacio aéreo jurisdiccional de República Dominicana, (FIR de Santo Domingo). Estamos hablando del 1975. Sin embargo, existían transportistas dominicanos con un buen impacto en el mercado, tanto de pasajeros como de carga aérea, que brindaban la posibilidad de empleo en el ámbito del pilotaje, mecánicos, sobrecargos , azafatas, despachadores y otros tecnicos especializados en el ámbito de transporte aéreo comercial .
Hace un tiempo lo dije en una nota como
esta y hoy lo repito, “estos profesionales son dos colosos de la aviación civil
de República Dominicana”.. y quien sabe. Cuando llegue al
sistema, ahí estaban estos hombres. Su característica más importante era su interés
por transmitirnos sus conocimientos a todos y cada uno de nosotros, quienes habíamos
llegado luego de un laborioso concurso, por oposición, donde seriamos evaluado
en un proceso muy riguroso con la participación de un asesor internacional
enviado por la Organización de Aviación Civil Internacional OACI, de apellido
Benedetti. El objetivo era escoger a 30 candidatos quienes viajarían al CIAAC de
Ciudad México a completar el referido curso, divididos en dos grupos de quince
15.
Roberto Acevedo Burgos y Rafael Campos Pina, aún siguen aportando al quehacer aeronáutico, por supuesto, desde sus respectivos ámbitos de actividades. A Campos Pina lo veo siempre en sus acostumbradas publicaciones en la que se refiere a temas de aviación, orientando aquellos interesados en la actividad. En el caso de Roberto hace un tiempo que no lo veo, pero espero estés bien, después una labor de vida dedicada a la aeronáutica civil, labor que en la que ha sido un ejemplo de honradez y laboriosidad, para todo aquellos o pudieran tener la intención de hacer las cosas bien hechas, no solo en el quehacer aeronáutico, sino también en el ámbito familiar y en el ambiente social en el que se desenvuelven.
Hoy dia, vemos a nuestro Campos Pina por ahi, trabajando como si tal cosa, lleno de energía y buen humor. ¿De qué material estarán hecho estos hombres? ….Un abrazo a los dos
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