Culpas y responsabilidades en los accidentes e incidentes de aviación

Planta de ensamblaje Airbus, Sevilla España Foto: EFE 

Resulta frecuente cuando ocurre un accidente, un incidente o cualquier otro evento relacionado con la actividad aeronáutica, que las personas y las organizaciones traten evadir su   responsabilidad sobre el hecho. Pero lo peor es,  que en muchos casos, se trata de buscar  responsables  para que la  culpa recaiga sobre  quienes no necesariamente fueron los causantes el evento. Con esa actitud, se trata de evadir las culpas propias o del equipo, pretendiendo que estas vayan a dar a  personas y organizaciones que, posiblemente, no tuvieron  que ver los factores   que condujeron al evento.

Cargar con la culpabilidad de  un accidente o incidente de aviación es desbastador. Sus consecuencias se  manifiestan en forma de pesadas cargas emocionales, que gravitaran en las personas para siempre. Yen el caso de las organizaciones, estas  afectan, gravemente, la confianza del público y por ende provocan grandes   perdidas en   los mercados y muchas veces provocan quiebras.

A propósito de las culpabilidades en los  incidentes o accidentes de aviación, echemos un vistazo al accidente del Airbus A440-M ocurrido el día 09 de mayo en Sevilla, España. En primer termino, de acuerdo a declaraciones a EFE del ejecutivo de Airbus Industries Marwan Lahoud, Jefe de Estrategias & Mercadeo de la Oficina  del Grupo Airbus en UK, éste declaró  que  <<lo que hay es un problema  de calidad en el ensamblaje final >>. También declaró que <<En concreto en el ensamblaje final,  "se instaló mal" el programa al control de motores, y eso fue lo que los averió y  condujo al siniestro>>.Estos procesos se realizan en Sevilla, España.

En otras declaraciones, el mismo ejecutivo de Airbus había dicho, en una entrevista al diario alemán “Handelsblatt”,  que las cajas negras habían revelado que “no hubo fallo estructural” en el A400M que se estrelló en el vuelo de prueba que realizaba en Sevilla, matando a cuatro de sus ocupantes. Mientras tanto Airbus, propiamente, se refiere a una multiplicidad de posibles causas.

De acuerdo a los resultados de la investigación preliminar del accidente, dadas a conocer el pasado día 03 de junio por  Airbus Insdustries, publicadas  en el diario El País, el fabricante dice que los motores 1,2 y 3 del A400M siniestrado del pasado 09 de mayo experimentaron una "congelación de la potencia",(términos poco usados) después del despegue y "no respondieron a los intentos de la tripulación de controlar los niveles "de la manera habitual". Sin embargo,  por otra parte, el presidente de Airbus Industries Patrice Bregier declaró que "el problema no esta en la concepción del avión"y habla de debilidades en los procesos de prueba del avión. Estos procesos se completan en Sevilla.

Si observamos el panorama, parece  que a  Sevilla en algo se le "carga el dado", en el entendido de que los resultados concluyentes de la investigación,  aun  no se han publicado, por lo que resulta temprano para para que los andaluces comiencen a  cargar con el  fardo de ese lamentable accidente. A pesar de que nadie duda de  la calidad de los procesos y productos de Airbus Defence and Space, lo importante es  determinar las causas reales que condujeron al siniestro y así evitar que ocurran otros percances causados por los mismos factores y que, en consecuencia, el A400M continúe  en su fase de producción , de acuerdo a sus proyecciones  de mercado.

De lo que si se puede estar seguro es que alguien grande perderá su puesto en la Airbus Industries. Pero la marea no se quedará ahí, y posiblemente la soga también romperá por lo más flaco, de la zona andaluza. Por experiencia he conocido varios casos en  que las culpabilidades de eventos aeronáuticos han sido adjudicadas  a personas y organizaciones, cuya actuación en nada estuvieron comprometidas con los eventos en cuestión. Esas situaciones han resultado devastadoras para profesionales y técnicos, quienes han tenido que cargar con el fardo de culpabilidades ajenas.