Un pesado B-747-400 de British Airlines, despega con toda su majestuosidad desde Heathrow, Londres. Foto: Airlines.net
En aviación
pueden presentarse situaciones o circunstanciales
que pueden convertirse en desagradables eventos, que incluso pueden alcanzar la categoría de accidentes aéreos. Sin embargo, en aviación también
ocurren cosas particularmente extrañas,
de esos que jamás pensaríamos que pudieran convertirse en un inconveniente que
haga imposible continuar con un vuelo, e incluso obligar a la tripulación a tomar la costosa decisión
de retornar al aeropuerto de salida, o bien,
desviarse al aeropuerto alterno en ruta.
Uno de
esos eventos del tipo que nos
referiremos, pasó hace ya algún tiempo, cuando fue publicado por Daily Mail. Sin embargo, el asunto ha reaparecido
en algunos medios, removiendo las circunstancias del
desagradable percance. El incidente de referencia le ocurrió
a un vuelo de itinerario de British, inmediatamente después del despegue. El avión había despegado desde el Aeropuerto de Heathrow
y su destino era Dubái. Sin
embargo, después de media hora de vuelo, el avión debió retornar al aeropuerto
de salida por un intenso y asfixiante “mar
olor” que se presentó con gran intensidad en la cabina principal de pasajero.
Posible ruta del B-747-400 de British, LondresDubai, cuando ocurrió del evento a bordo
De
acuerdo a lo que se supo, la situación
se presentó cuando un pasajero entró a uno de los baños o toilet del Jumbo, con el objetivo de “satisfacer una urgente necesidad fisiológica”. Sin embargo, al término
de “la operación” por parte del pasajero, el terrible mal olor proveniente del baño que invadió
toda la amplia cabina de pasajero del avión, requirió que la tripulación
de mando del B-747-400 de British, tomara y requiriera la autorización de retornar al aeropuerto de salida, ocasionando pérdida que alcanzan miles de dólares.
Sin
pretender afinar el costo del corto vuelo del British, si el avión retornó después
de media hora de vuelo, esto quiere
decir que el avión voló media hora más,
para llegar al aeropuerto completando un hora de vuelo. Sin embargo, para un vuelo planeado para 7 horas, el peso del avión debió estar bastante
arriba del MLW, “peso máximo de aterrizaje”, debido a la gran cantidad de combustible del despegue. Debido a ello lo más probable fue que debió “dompiar bastante combustible”, para perder
peso y ajustarse a los números. Esto
quiere decir que la urgencia del pasajero al ir al baño, tuvo un costo muy por encima de los US$30,000.00, teniendo en cuenta el combustible,
handling de aeropuerto, cátering, protección a pasajeros después del aterrizaje y otros gastos
relacionados con la operación.
Aunque jamás me he visto en una situación tan extrema como la ocurrida a British,
en una oportunidad, mientras ocupaba un jump seat, en un vuelo Santo Domingo, Nueva York, me vi precisado a “colocarme la máscara de oxígeno”,
debido a que alguien de la tripulación de la cabina de mando de la aeronave, no tuvo el tiempo que tuvo el
pasajero de British, para utilizar “el
toile” del HI-242.
No hay comentarios:
Publicar un comentario