Capitán Héctor Brito Gonzalez, con galones de copiloto en la escalera de la puerta del un B-727 de CDA
Durante la mañana de hoy, tuve la agradable sorpresa de recibir la llamada de una distinguida dama de la aeronáutica dominicana, pero de esas personas que que son expresión viva de laboriosidad, la elegancia y la distinción. Nuestra conversación giró al rededor una de esas personas que vinieron al mundo a trabajar intensamente, para hacer el bien y para enseñar a los demás, no importándole quien pudiera ser o cual iba a ser el nivel de agradecimiento en el futuro. Esa persona al rededor de quien giró la conversación fue el Capitán Héctor Brito González, de cuyo trágico fallecimiento se cumplen hoy precisamente 21 años.
Héctor Brito dedicó la
mayor parte de su vida al arte y la técnica del vuelo, actividad por la que
vivió y a la que ofrendó su vida a media
tarde del miércoles 31 de octubre del 1994, cuando intentaba despegar una pequeña
aeronave desde del viejo Aeropuerto Cibao de Santiago de los Caballeros y cuyo de destino era el Aeropuerto de Herrera.
Durante su prolongada vida profesional en la línea de vuelo, el Capitán Brito
acumuló miles de horas de vuelos de forma que para referirse a su sobrada experiencia de vuelo, decíamos a menudo a cualquiera, “este o
aquel tiene más horas de vuelo que el Capitán
Brito”.
La carrera del Capitán
Brito fue una de esas en que completado todo el ciclo,
desde aeronaves ligeras, medianas y pesadas, llegando a capitanear el “Jumbo”
el B-747, siendo uno de los cuatro
primeros y únicos capitanes dominicanos que volaron un gigantesco Jumbo con matrícula dominicana. Por cierto, me toco precisamente a mi, consumir muchas horas de vuelo en sus cabinas de vuelo cruzando el Atlántico sentado tranquilamente en sus cabinas de mando cuando CDA realizaba vuelos de itinerario y charters entre Santo Domingo y Milán, Italia.
Conocí al Capitán Brito por la Frecuencia 118.1 MHZ de torre Las Américas, cuando él volaba un DC-3 de Aerovías Quisqueyana que operaba vuelos desde Santiago de los Caballeros a Las Américas, para conectar con los vuelos diarios de los “Connie” L-749 de la empresa Aerovías Quisqueyana a San Juan de Puerto Rico. Después de ello, el Capitán Brito realizaba los vuelos de itinerario en los DC-3 de la Aerolineas Aerovias Quisqueyana a Curazao junto al Capitán José Maria Sanchez Perez, entre otros tripulantes de la epoca. Luego, a mediado de los setenta, comenzó a volar los Constellation L-749 y L-1049 de la "Lockheed" de Aerovias Quisqueyana. En ese periodo el Capitán Brito y el Capitán Eugenio de Marchana integraron una dupla muy habitual en la ruta Aeropuerto Internacional Las Americas Dr. JFPG, Santo Domingo, Aeropuerto de Isla Verde, Dr. Munoz Marin, San Juan Puerto Rico, Aeropuerto Internacional Dr. JFPG, Santo Domingo, realizando dos vuelos diarios en la ruta como el QQ-201/02 en las mañanas y el QQ-203/04 en las tardes.
Conocí al Capitán Brito por la Frecuencia 118.1 MHZ de torre Las Américas, cuando él volaba un DC-3 de Aerovías Quisqueyana que operaba vuelos desde Santiago de los Caballeros a Las Américas, para conectar con los vuelos diarios de los “Connie” L-749 de la empresa Aerovías Quisqueyana a San Juan de Puerto Rico. Después de ello, el Capitán Brito realizaba los vuelos de itinerario en los DC-3 de la Aerolineas Aerovias Quisqueyana a Curazao junto al Capitán José Maria Sanchez Perez, entre otros tripulantes de la epoca. Luego, a mediado de los setenta, comenzó a volar los Constellation L-749 y L-1049 de la "Lockheed" de Aerovias Quisqueyana. En ese periodo el Capitán Brito y el Capitán Eugenio de Marchana integraron una dupla muy habitual en la ruta Aeropuerto Internacional Las Americas Dr. JFPG, Santo Domingo, Aeropuerto de Isla Verde, Dr. Munoz Marin, San Juan Puerto Rico, Aeropuerto Internacional Dr. JFPG, Santo Domingo, realizando dos vuelos diarios en la ruta como el QQ-201/02 en las mañanas y el QQ-203/04 en las tardes.
Luego el Capitán Brito pasó a
volar los aviones de la Compañía Dominicana de Aviación en los aviones de carga, los DC-6. Pero no tardó mucho para que fuera
integrado a las cabinas de la flota de B-727, donde estableció una “dupla”,
piloto, copiloto, con el Capitán Jorge Percival, quien lo convirtió en un verdadero “zorro del aire” y una de esas tripulaciones
con quien a uno le gustaba volar, siendo, sobre todo, uno de los privilegiados a quienes llamábamos los “manos de seda”, sobre todo en los aterrizajes de los aviones, sin importar el viento predominante en el aeropuerto de destino.
Como referí anteriormente,
Héctor Brito fue seleccionado para integrar el equipo de capitanes del
B-747-123 de Dominicana de Aviación, cuando República Dominicana operó su propia aerolínea bandera nacional,
demostrando fehacientemente, los dominicanos si tenemos la capacidad para hacerlo y hacerlo bien. Al cierre de Dominicana de Aviación ya el Capitán Brito estaba fuera de la linea de vuelo de la empresa por asunto generacional y ciertas limitaciones en el orden medico para mantener la licencia de vuelo.
Brito perdió la vida realizando una de las actividades de más ano en la vida, volando. Su deceso de debió aun accidente de aviación que sufrió cuando despegaba del antiguo Aeropuerto de Santiago de los Caballeros,durante una de un jueves hoy 21 años. El Capitán había despegado su avión acompañado de dos personas a quienes como de costumbre transportaba de manera gratuita en la aeronave,"Brito no dejaba a nadie". Entre los acompañantes del Capitán Brito y que también perecieron se encontraba un nacional israelitas a quien llamábamos "Lulo" y a quien conocí muy bien, debido y que se dedicaba a negocios relacionados con la aviación comercial. Lulo vivía en el poblado de Boca Chica.
Finalmente acompañamos al Capitán Héctor Brito Gonzales hasta su ultima morada en el Cementerio Cristo Salvador del Sector Oriental de Santo Domingo. El Capitán Brito fue despedido por el vuelo de una aeronave que sobrevoló el Campo Santo a muy baja altura mientras arrojabas arreglos florales sobre la tumba del Capitán Brito.
Brito perdió la vida realizando una de las actividades de más ano en la vida, volando. Su deceso de debió aun accidente de aviación que sufrió cuando despegaba del antiguo Aeropuerto de Santiago de los Caballeros,durante una de un jueves hoy 21 años. El Capitán había despegado su avión acompañado de dos personas a quienes como de costumbre transportaba de manera gratuita en la aeronave,"Brito no dejaba a nadie". Entre los acompañantes del Capitán Brito y que también perecieron se encontraba un nacional israelitas a quien llamábamos "Lulo" y a quien conocí muy bien, debido y que se dedicaba a negocios relacionados con la aviación comercial. Lulo vivía en el poblado de Boca Chica.
Finalmente acompañamos al Capitán Héctor Brito Gonzales hasta su ultima morada en el Cementerio Cristo Salvador del Sector Oriental de Santo Domingo. El Capitán Brito fue despedido por el vuelo de una aeronave que sobrevoló el Campo Santo a muy baja altura mientras arrojabas arreglos florales sobre la tumba del Capitán Brito.
Los mejores recuerdos del
Capitán Brito son necesariamente los
relacionados con su permanente disposición
para volar e instruir en un quehacer de amó profundamente. En ese quehacer me tocaron muchas horas de vuelo en su siempre agradable compañía. Confieso que nunca
vi al Capitán negarse a realizar un vuelo, no importaba el día o la
hora y mucho menos el destino. Por esta condición Brito era una de las primeras y más segura opciones a llamar cuando había problemas en la línea de vuelo, por falta de capitanes, ese fue el Capitán Héctor Brito.
A 21 años de su partida, solo rogar al Altísimo que lo tenga en el sitio donde van esa gentes que no hacen daño a nadie y solo están para con trabajar honestidad y a hacer el bien a todos los que le rodean.
A 21 años de su partida, solo rogar al Altísimo que lo tenga en el sitio donde van esa gentes que no hacen daño a nadie y solo están para con trabajar honestidad y a hacer el bien a todos los que le rodean.
6 comentarios:
Gracias mil Mullix por tan lindo reportaje! Estoy mas orgullosa que nunca de mi Papa!
Papi siempre decia que cuando se fuera de este mundo era muy probable que no me dejara cosas materiales, pero si un apellido limpio y una memoria de un hombre que lo dio todo por los suyos, y asi fue. Me llena de orgullo llevar su sangre y saber que todos lo recuerdan como el gran hombre que fue. Gracias don Ignacio por el articulo, un abrazo.
-Hector Brito Rodriguez (tito)
Hola,
Mi nombre es Juan Manuel Chayep. Soy comandante de A330 en Aerolíneas Argentinas.
Estando de posta en Punta Cana recordé nombres de los que me hablaba mi padre allá por 1985/86.
Mi padre, Sergio Chayep, era por entonces comandante de B747 en Aerolíneas Argentinas y había sido contratado por tres meses para habilitar pilotos en Dominicana de Aviación. Uno de ellos fue el Capitán Brito.
Lamento mucho su partida. Algo que omitiré contarle a mi padre ya con 87 años.
Saludos
Gracias Con Ignacio sobre el articulo sobre mi padre Capitán Héctor Brito González. Héctor Brito jr
Don Ignacio
Hola quisiera saber mas sobre ese accidente ya que conocía al Capitan Brito. Yo volaba para ese entonces al Cibao en aviones Dc3. No hay reportes de archivo de ese accidente. Que matricula era? Ademas las fechas no concuerdan en el reportaje. Gracias.
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